Hace unos meses Alex inició una nueva actividad para este blog: plantear un reto cada mes y tratar de cumplirlo. En Junio fueron las marchas de Íñigo Cuesta y de Castilla la Vieja, Julio quedó un poco colgando por todo el tema de la Trilla, en Agosto organizamos la Marcha Ribera del Trema con gran éxito y en Septiembre participamos en la Maratón Alpina Medinesa a un gran nivel.
Este mes hemos querido hacer algo diferente. Planteamos un reto con un punto de locura, sin saber muy bien si seríamos capaces de alcanzarlo. Cosas del azar, este año han coincidido dos pruebas deportivas el mismo fin de semana. No suele ser habitual poder asistir a dos eventos deportivos en un espacio de tiempo tan pequeño, pero resulta que el día 23 de Octubre se celebró el 2º Maratón nocturno de Bilbao (con la posibilidad de hacer la modalidad de medio maratón) y precisamente el 24 tuvo lugar el Duatlón cross de Orduña.
Este mes hemos querido hacer algo diferente. Planteamos un reto con un punto de locura, sin saber muy bien si seríamos capaces de alcanzarlo. Cosas del azar, este año han coincidido dos pruebas deportivas el mismo fin de semana. No suele ser habitual poder asistir a dos eventos deportivos en un espacio de tiempo tan pequeño, pero resulta que el día 23 de Octubre se celebró el 2º Maratón nocturno de Bilbao (con la posibilidad de hacer la modalidad de medio maratón) y precisamente el 24 tuvo lugar el Duatlón cross de Orduña.
Se puede decir que nos habían servido el reto en bandeja. Así que sólo era cuestión de prepararse física y mentalmente para completar las dos pruebas haciendo un papel digno.